Mirador Virtual Mobile

Alerta en el mercado: el Tesoro se queda sin dólares y suben las tasas, a la espera del auxilio de EEUU

En una jornada clave, el Tesoro enfrenta una marcada escasez de dólares para sostener el tipo de cambio fijo. Las tasas en pesos se disparan por falta de liquidez, mientras el mercado descuenta un inminente cambio en la política cambiaria.

El mercado enfrenta este jueves un día clave: el Tesoro se quedó prácticamente sin dólares para sostener el tipo de cambio – en torno a los u$s300 millones– dentro de la banda cambiaria. En el medio, un rumor sorprendió al mercado al final de la rueda del miércoles, en relación a que hoy sería el día en el que se esperan novedades de Washington, tras las declaraciones de Kristalina Georgieva. Sin embargo, la situación financiera se complica, con una fuerte suba de las tasas en pesos por falta de liquidez, y poco poder de fuego para contener el dólar, sin usar los dólares del Banco Central.

El dólar oficial cerró el miércoles a $1.410,60 para la compra y a $1.462,70 para la venta en el promedio de las entidades financieras que publica el Banco Central (BCRA) este viernes. En tanto, en el Banco Nación (BNA), el billete cotiza a $1.405 para la compra y $1.455 para la venta.

Las reservas brutas internacionales cayeron u$s136 millones, hasta los u$s42.066 millones. Fuentes oficiales dijeron a Ámbito que hubo pagos de deuda por aproximadamente u$s35 millones. El dólar cripto, opera este jueves como anticipo de el arranque de la rueda, con una suba del 0,3% ubicándose en los $1.550.

«El dólar mayorista cierra en niveles de venta del Tesoro, en una jornada calcada a las anteriores con muchas ventas en estos niveles. Se operaron u$s669 millones», reveló una fuente del mercado. En ese marco, los dólares financieros cayeron levemente luego del salto del martes. El CCL «Contado con Liqui» cotizó a $.1543,41 y el MEP, a $1.527,95. Por su parte, el dólar blue trepó $25 y se vendió a $1.475.

En el sector de dólar futuro, hubo incrementos en los tramos cortos pero caída en los plazos más largos. Pese a la intervención del BCRA para dar cobertura ante la creciente expectativa de un giro en el esquema cambiario después de las elecciones, el mercado ya pricea un tipo de cambio mayorista a $1.593 para fin de año.

La suba de tasas, otra complicación

En el marco de las tensiones cambiarias y en la antesala de las elecciones legislativas nacionales, las tasas en pesos se volvieron a recalentar. Los operadores sostienen que ya lleva varios días la falta de liquidez en el sistema y que esto podría reeditar la extrema volatilidad que se vio en la salida de las LEFIs.

De hecho, el miércoles, la tasa de caución a un día tocó un máximo de 45% TNA y el REPO interbancario alcanzó el 57% TNA. Advierten que de continuar esta situación, es «probable» que vuelvan a subir tasas de préstamos a empresas y pazos fijos.

Cabe resaltar que el Banco Central estaba poniendo un «piso» a las tasas de interés en la rueda de simultáneas de BYMA, desde donde absorbe pesos al 25% TNA (nivel al cuál llegó después de las elecciones en PBA en un intento de bajar los altos rendimientos que afectaban el sistema). Sin embargo, esta semana, esta referencia empezó a perderse ante una renovada falta de liquidez en pesos, que se evidenció en la tasa de caución que superó el 40% TNA, el REPO interbancario que sobrepasó el 50% TNA y las Lecaps que alcanzaron el 48% TNA.

Se disparan las tasas de caución

«La tasa de caución continúa por encima de lo que venía operando y la única explicación más o menos convincente para las subas tiene que ver con las expectativas de suba del dólar post elecciones y la incertidumbre respecto de la continuidad del esquema actual«, explicaron, en esta jornada, desde Outlier, desde donde también indicaron que la suba de tasas «afectó el martes más fuerte a la renta fija en pesos en general, probablemente porque las mencionadas expectativas ahora están alimentadas por las ventas sostenidas del Tesoro».

Más allá de las novedades que puedan surgir desde Estados Unidos, el mercado da por hecho que la demanda dolarizadora seguirá firme, sin importar el colchón financiero que logre construir el ministro de Economía en Washington. Esta convicción se apoya en la percepción generalizada de que el esquema de bandas cambiarias ya está agotado y que, tarde o temprano, será necesario un cambio en la política monetaria. Ese giro implicaría un tipo de cambio más alto, condición indispensable para acumular los dólares que la economía necesita.

Fuente: Ámbito

Comentarios

comentarios