La Ordenanza promulgada no es un cheque en blanco
Ante la promulgación por parte del Intendente de la Ordenanza 24.065 que declara la «Emergencia en Infraestructura y Salud Escolar», aprobada por mayoría en el Concejo Deliberante, nuestro sindicato expresa varias consideraciones.
La reciente promulgación de la Ordenanza 24.065 por parte del Ejecutivo municipal que declara la “Emergencia en Infraestructura y Salud Escolar”, obliga a las autoridades a pensar en cambios estructurales
El SUTEBA Gral. Pueyrredon reconoce como un paso importante la promulgación de dicha Ordenanza en tanto se inviertan los recursos financieros, materiales y humanos que respondan a las verdaderas necesidades del distrito y no sólo para acortar los plazos de ejecución de obras o licitaciones y decididas por un grupo de técnicos o funcionarios.
En una ciudad como la nuestra, incluido Batán, y con un sistema educativo provincial y municipal extendido en todo su territorio –tan sólo el sistema educativo pcial contiene 222 edificios donde funcionan 345 escuelas de distintos niveles- más del 50 % de los mismos tienen distintos grados y situaciones de deficiencia y gravedad en términos de infraestructura edilicia. ¿Hablamos sólo de ladrillos o de aproximadamente 19.900 niños, niñas, jóvenes y adultos, que por estas situaciones hoy no tienen garantizado su derecho a la educación en Mar del Plata?
La promulgación de la Ordenanza 24.065, si es acompañada por la puesta en marcha la Comisión de Seguimiento del Fondo de Financiamiento Educativo y poner en valor real a la Unidad Ejecutora de Gestión Distrital en la definición de las prioridades del distrito, posibilitará que no se trabaje sólo en la emergencia sino en un plan integral de abordaje que contemple también la salud escolar.
Comenzar a planificar significará desandar las consecuencias nefastas de la Reforma Educativa de los años ‘90 que compactaron en un mismo edificio escuelas primarias y secundarias, quitando tanto a unas como a otras los espacios necesarios para una educación de calidad y que no sólo influye en el proceso enseñanza-aprendizaje sino también en la salud de las/os trabajadoras/es de la educación. Tampoco puede dejarse de lado la necesidad imperiosa de construcción de Jardines de Infantes para cumplir con la ley de Educación vigente.
Dice la UNESCO en su Informe “Suficiencia, equidad y efectividad de la infraestructura escolar en América Latina” (Unesco-BID, 2017), “Estudiar en una escuela con suficientes espacios físicos de aprendizaje, es decir, una escuela con agua potable, baños, electricidad, teléfono, biblioteca, algún espacio para el deporte o reuniones colectivas de los alumnos y con aulas dotadas de los materiales básicos está generalmente asociado con mejores aprendizajes escolares. Esto que parece una afirmación de sentido común, sorprendentemente, no se ha traducido a la realidad en un buen número de sistemas educativos de la región, donde una parte de los estudiantes, especialmente de aquellos pertenecientes a familias pobres o de las zonas rurales, no tiene asegurado el acceso a las escuelas con dichas características básicas”.
La situación caótica que hoy se observa en la intervención edilicia por parte de las autoridades provinciales y municipales que gestionan los recursos del Estado sólo será efectiva si se lleva adelante dicha planificación y con todos los actores involucrados. El Honorable Concejo Deliberante no ha votado por amplia mayoría un cheque en blanco.
Es la oportunidad de que la ciudad de Mar del Plata y Batán cuenten efectivamente con la puesta en práctica de los 12 puntos del Acuerdo Paritario Nacional de la CTERA del 2011 y firmado por el Estado Nacional –refrendada por la Superintendencia de Riesgos de Trabajo dependiente del Ministerio de Trabajo de la Nación- y en el cual se establecen las condiciones básicas para garantizar la seguridad en las escuelas. No hacerlo sería estar nuevamente ante un simple parche.
Gustavo Santos Ibáñez
Secretario General
Zulema Casanova
Secretaria de Salud y CyMAT
Consejo Ejecutivo Seccional – SUTEBA Gral. Pueyrredon