Mirador Virtual Mobile

Oficios sin género: plomeras, electricistas y albañiles

Atrás quedaron los días donde estas tareas eran sinónimo de masculinidad. Las mujeres seguimos conquistando ámbitos y ahora nosotras también nos hacemos de agujereadoras y tornillos, y ponemos manos a la obra.

Cada vez se escuchan menos frases como «eso es de varón», «las chicas no pueden hacerlo» o hasta «quedás marimacho haciendo eso». Las mujeres demostramos que podemos, nos atrevemos y sabemos.

Hasta no hace tanto tiempo atrás, las escuelas técnicas, sin ir más lejos, eran reinados masculinos porque justamente esas «eran tareas de hombres» ¿Y en nuestras casas? Seguramente muchas tengamos la imagen de nuestros padres cambiando el cuerito de una canilla, el enchufe de un electrodoméstico y hasta colgando un cuadro porque eran «trabajos rudos».

Con el gran cambio de paradigma que estamos viviendo, las luchas feministas y la independencia ganada por la mujer, muchas de las tareas que antes eran relegadas para nosotras ahora se convierten en una opción más a la que podemos acceder, sin tener que esperar a ningún príncipe o caballero que venga al rescate.

«Amo mi oficio. Amo las posibilidades que me da, las casas que visito, las clientas que me eligen y yo elijo. Amo la independencia, el servir con mi trabajo, el olor a ferretería vieja, mi taller de herramientas. Amo haber ganado habilidad, fuerza y equilibrio, dominar mi cuerpo, trabajarlo. A fin de cuentas, amo que todo esto que significa mi oficio sirva también para cuestionar esta sociedad, que tantos años estuvo cuestionándonos a todas», cuenta Fer Della Costa, quien pinta y realiza trabajos de albañilería.

Fer es una de las tantas mujeres de una nueva generación que, sin pedir permiso, y sin prejuicios se anima a realizar lo que le gusta, como Yamila Naza y Maira Gómez, quienes, cada una con su oficio -electricista y albañileria, respectivamente-, no sólo están en contacto con lo que más les gusta hacer sino que hoy pueden vivir de ello, ya que integran el grupo de Facebook «Mujeres Trabajando», donde muchas ofrecen sus servicios y, por sobre todo, reivindican el girl power: «El grupo sirve para conectarnos entre nosotras pero también para pensar que los oficios no tienen género», dice Maira.

Tareas rudas y feminidad, ¿combinación viable?
Para muchas, la respuesta a esta pregunta es un gran y contundente ¡Sí! Además de que básicamente no existe ninguna imposibilidad per-sé para que una mujer pueda hacer tareas de reparación, los estereotipos sobre qué es de mujer y qué es de hombre, o qué determina a cada cual, ya no son considerados como reglas. De esto sabe y mucho Bernardita Siutti, alias Mami Albañil, por su cuenta de Instagram, desde la cual brinda tips, consejos y el paso a paso para hacer arreglos y trabajos en casa, con un look fresco, joven y en el que comparte además sus facetas como mamá, amiga y mujer, sin que ninguna anule a la otra. «Creo que lo más importante es saber que todos podemos hacer cualquier cosa. No importa el genero, ni la altura, ni la clase social. Creo que también es un tema cultural. En otros países es súper común ver mujeres albañiles o amas de casa que arreglan sus casas. Quizás en Argentina estamos un poco más atrasados en cuanto al pensamiento», opina la instagramer.

A su vez, afirma que no tuvo que enfrentarse a grandes prejuicios por hacer tareas consideradas de hombres y que le escriben muchísimos pintores y/o albañiles para decirle que les gusta mucho lo que hace o que incluso a veces usan los tips que da en sus videos.

Bernardita se animó, desafió a sus familiares y amigos y se lanzó a emprender este proyecto: «Mami albañil surgió un poco en chiste y un poco no. Toda mi vida amé hacer arreglos, lo hice siempre. Como vivo en una casa vieja, por suerte siempre tenía muchas cosas por hacer y arreglar. Siempre digo que es mi terapia hacer cosas de la casa (todo menos planchar, ¡ja!). Y un dia, en un asado con amigos me cargaban por todas las cosas que hacía, me decían: ‘¿qué te haces la albañil?‘ Y ahí les dije: ‘me voy a abrir una cuenta en Instagram y van a ver que me va a seguir todo el mundo’. Por supuesto, se me mataron de risa en la cara y medio que yo también», pero hoy, después de poco menos de un año y medio, ya cuenta con 164 mil seguidores que son testigos de su empoderamiento, entusiasmo y secretos.

«Les aconsejo (a las mujeres) que se animen, que prueben, que se informen y que sean lanzadas. Yo todo lo aprendo con YouTube y torturando a primos y amigas arquitectas. La clave está en las ganas de aprender y no quedarse en la comodidad de la cocina y la plancha. Podemos hacer mucho más que un pollo al horno con papas», asegura.

¿Querés empezar?
Tal vez estabas dudando, necesitando un último empujón o, por el contrario, ni se te había ocurrido hasta leer estas líneas, sea cual fuera el motivo por el cual te dieron ganas de empezar a hacer vos misma las tareas en tu casa -o, por qué no, en casas ajenas-.
Guillermo Gambetta, brand owner de TOC TOC Reparaciones, brinda una guía con el kit básico y algunos tips para iniciarte en este mundo, y además celebra la incorporación de la mujer en estos rubros: «Antiguamente se decía que estos trabajos eran de hombres, y desde nuestro lugar nos esforzamos en contradecir. Este año pudimos expandir el equipo de trabajo e incorporamos a la mujer como par, no porque ahora creo que una mujer podría hacerlo sino porque por fin vivimos en un país un poco más igualitario y podemos romper con esas diferencias y esas costumbres de antaños que tanto nos condicionaron y nos convirtieron en una sociedad machista».

¿Querés saber cómo iniciarte? Indefectiblemente, vas a necesitar tener tu propias valija de herramientas. Gambeta detalla los elementos necesarios, y algunos tips:

Armá tu valija de herramientas. Esta es como un ser viviente, va creciendo y mutando con el pasar del tiempo. Vas a empezar comprando una herramienta, otra y así la vas llenando. No te aflijas si en el camino vas perdiendo algunas, hasta suele suceder que prestamos y no vuelven.

En fin, si vas a iniciar tu valija de hogar debe tener por lo menos un destornillador punta phillips y uno plano (medianos), un martillo, un alicate, una pinza de punta o una de fuerza, una sierrita -no hace falta un gran serrucho, pero una sierrita es muy útil-, cinta aisladora negra, precintos de varias medidas, tarugos py de 6 y 8 milímetros y tornillos acordes, indispensable un nivel para colocar un estante o un cuadro derecho, una cinta métrica que por lo menos mida 3 metros, una llave pico de loro y una llave francesa mediana. Con eso podríamos reparar casi toda nuestra casa; obviamente hay cosas que requieren herramientas especiales, pero con esto estamos muy bien.

Mechas. Uno de los puntos que suele generar mayores dudas. A tener en cuenta, hay 3 tipos de mechas clásicas: para madera, que en su punta tiene una especie de pinche para clavarla en esta superficie; de acero, que son para agujerear todo tipo de metales; y mechas de vidia, que son las de pared, tienen dos aletas en su punta, y con estas agujereamos paredes de concreto, ladrillo, ladrillo hueco y demás.

¿Cambiamos el cuerito? Si bien esta tarea está en sus últimos días, debido a que las canillas nuevas ya no utilizan este método, para las clásicas el cambio de cuerito no requiere muchas habilidades y con sólo un destornillador y una llave francesa o bien una pico de loro ya lo podremos hacer.

Para cambiarlo, hay que sacar la pequeña tapa que está arriba de la canilla, retirar el tornillo que a continuación veremos, desenroscar la campana que lo cubre y finalmente retirar el cuerito de goma averiado y reemplazarlo por uno nuevo.

Nos deshacemos de prejuicios, comentarios y del qué dirán. Si queremos agarramos pico y pala y reformamos toda la casa. Animate a esta revolución que nos invita a hacer todo nosotras mismas.

Comentarios

comentarios