Los focos se registran en Córdoba, Catamarca, La Rioja, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Buenos Aires, La Pampa, San Luis, Santiago del Estero y Misiones.
El 95 por ciento de los incendios que actualmente afectan a once provincias fueron producidos por intervenciones humanas, que van desde colillas de cigarrillos mal apagadas hasta la preparación de áreas de pastoreo con fuego, según lo informado hoy en el primer reporte diario del Servicio Nacional de Manejo del Fuego (SNMF) del Gobierno nacional.
En este sentido, el informe advierte que «inciden en su propagación» factores climáticos como «la falta de precipitaciones, las temperaturas elevadas, el bajo porcentaje de humedad, las heladas constantes y los vientos fuertes», y señala que, por ese motivo, hay que ser «muy cautos especialmente cuando se dan estas condiciones, para evitar que los incendios se propaguen».
En el reporte oficial se detallan los focos que se registran actualmente en once provincias: Córdoba, Catamarca, La Rioja, Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, Buenos Aires, La Pampa, San Luis, Santiago del Estero y Misiones.
En Catamarca, los incendios en el departamento de Capayán se encuentran contenidos, mientras que en Ancasti siguen activos.
En La Rioja en los departamentos de Independencia y Peñaloza siguen activos, lo mismo que sucede en Córdoba en las zonas de de Ischilin, Valle de Punilla y Cosquín.
En el área comprendida entre Santa Fe y Entre Ríos, los departamentos de Diamante y Concepción del Uruguay tienen el fuego contenido mientras que en Victoria continúa activo otro foco.
En Corrientes, la capital presenta dos focos de incendios, de los cuales uno se encuentra contenido y el otro activo.
En la provincia de Buenos Aires, en Zárate a la altura del km 12 de la ruta nacional se encuentra contenido, en el km 96 y 110 se encuentra controlado, mientras que en San Fernando el foco de incendio se encuentra activo.
En La Pampa, en los departamentos de Realicó y Rancul los incendios forestales se encuentran controlados.
En San Luis, el foco está en Junín, que se mantiene activo hasta el día de hoy.
En Santiago del Estero, el departamento de Rivadavia tiene hoy el incendio controlado, mientras que en la provincia de Misiones las áreas de Apostoles tiene el fuego controlado mientras que en Candelaria está contenido.
En tanto, se precisó que, desde el Gobierno nacional se desplegaron recursos humanos, vehículos especiales, medios aéreos y equipos operativos como complemento a las estructuras jurisdiccionales de lucha contra el fuego.
El ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, viajó a Córdoba para sobrevolar la zona afectada por los incendios y visitar el centro de operaciones que está en Cosquín, se informó.
En tanto, el subsecretario de Gestión del Riesgo y Protección Civil del Ministerio de Seguridad, Gabriel Gasparutti, se encuentra en Córdoba desde el martes y recorrió las zonas afectadas junto al ministro de Seguridad de la provincia.
El SNMF indicó que hoy se reunirá el Comité de Emergencia Ambiental, con la participación de autoridades del Ministerio de Ambiente, de la Administración de Parques Nacionales, de las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe y los municipios de Rosario y Victoria, por los focos activos en el Delta del Paraná.
En esa zona ya trabajan 40 agentes de la Administración de Parques Nacionales en el monitoreo, prevención y colaboración en tareas de manejo del fuego.
Las especies amenazadas por los incendios son «el ciervo de los pantanos, en peligro de extinción, y comunidades vegetales arbóreas: como el bosque fluvial mixto (sauce criollo, aliso de río, canelón y laurel entre otros, y la selva en galería o ‘selva ribereña'», se explicó.
En Córdoba, «en las zonas quemadas disminuyen las poblaciones de mamíferos pequeños, anfibios y reptiles, debido a sus áreas de vida reducidas, escasa capacidad de huida y dificultad para encontrar nichos después de las quemas o incendios».
«Esto produce además un efecto en las cadenas tróficas ya que la disminución de la densidad de pequeños mamíferos, como los roedores, puede influir negativamente en la disponibilidad de alimento para sus depredadores naturales. Las especies de rápido movimiento, como los mamíferos medianos y grandes, pueden tener problemas en la competencia por recursos fuera de sus hábitats originales», aseguraron.
«Las aves también sufren impacto porque se destruyen los sitios en los que anidan o porque tienen sus perchas en los pastizales altos o juncales», concluyeron.
Fuente: mardelplata.telefe.com