El OFEMMM mediante un comunicado, informó:
«Desde nuestro Observatorio de Femicidios de la Multisectorial de la Mujer OFEMMM, vemos con gran preocupación una escalada de violencia machista y de femicidios en lo que va del año son 202 femicidios y 13 vinculados; en lo que va del Aspo registramos desde el 12 de marzo hasta el 31 de octubre 155 femicidios y 11 vinculados.
Decimos que en estas escalada alarmante, dónde el Estado apaña en lugar de sancionar administrativa y penalmente a funcionarios públicos que en lugar de actuar en forma inmediata en la búsqueda ante una desaparición de una mujer no reciben las denuncias de los familiares o las archivan como sucedió en el caso de Paola Tacacho en Tucumán, donde ella realizó 16 denuncias contra su ex alumno que la acosaba y amenazaba de muerte y que finalmente la terminó asesinando en plena vía pública.
En el caso de Florencia Gomez Poiullastrou dónde ya han pasado 20 días de su femicidio y aún no hay detenidos. Si bien es cierto que hoy existen Programas para abordar la violencia hacia las mujeres y diversidades tanto desde el Ministerio de la Mujer, Género y Diversidad, consideramos que estas acciones a nivel nacional y provincial, aún son tímidos intentos que no atacan a fondo este flagelo.
Evidentemente es la ausencia estatal la que permite que nos maten.
Comprobamos que nuestros reclamos son desoídos en tantas ocasiones y solo somos escuchadas cuando tienen la marca de lo colectivo que siempre resuena con la fuerza de la necesidad que esta violencia debe terminar Ya! .
Los femicidios no distinguen edad sino tampoco clases sociales como fue el femicidio de Silvia Saravia que sucedió dentro de un country a manos de su esposo, un renombrado empresario. Pero la realidad demuestra que quienes más sufren la violencia a manos de sus agresores, son las mujeres más humildes, sobre todo en Jujuy, Tucumán como en otras provincias del norte de nuestro país con gobiernos machistas y patriarcales, con un profundo odio de clase que sienten los poderosos por las mujeres y especialmente mujeres pobres, mestizas e indígenas.
Desde OFEMMMM debemos visibilizar las particularidades de este grupo especialmente vulnerable a las distintas modalidades de la violencia de género y que tiene mayores dificultades de acceder a la justicia. Pero lo que une a estos femicidios, sea de una u otra clase social y económica, es muchas veces el SILENCIO; ese manto de silencio que en las mujeres más humildes es por miedo, vergüenza o no tener dónde ir con sus hijxs y en la clase social más alta es » por querer mostrar que todo está bien».
Según datos de Unicef, en Argentina durante la pandemia 21800 mujeres sufrieron violencia física de las cuales el 80% fueron a manos de sus parejas y solo el 13% fueron denunciados.
Se necesitan con urgencia campañas efectivas de difusión en los medios periodísticos y en todas las dependencias estatales, porque necesitamos que la violencia machista deje de llevarse a nuestras mujeres y se pueda visibilizar en lugar de considerarlo natural.
Exigimos efectivas políticas públicas para prevenir y erradicar la violencia de género y los femicidios.
Emergencia Nacional en Violencia de género YA!
Ni Una Menos, Vivas nos Queremos.


En esta variable encontramos que el 28,5 % de las víctimas fue asesinada a golpes, luego en segundo lugar con un porcentaje de 17, 4% estuvo el disparo y en tercer lugar se ubicaron el estrangulamiento y la puñalada con el 14,2 %.


En relación a las edades podemos encontrar que un alto porcentaje, esta vez del 48 % se ubicó en la franja de los 21-40 años, en segundo lugar con el 22, 6 % aparece la franja de los 41 -60 años, con un importante aumento sostenido a lo largo de las últimas mediciones y en tercer lugar con el 12, 3 % las víctimas comprendidas entre los 16-20 años.

En la variable vínculo entre la víctima y el victimario vemos que el 73, 4% de los femicidios fueron cometidos por ex parejas, cónyuges, novios. Es un dato muy significativo y la peligrosidad que representa vivir en cuarentena con el agresor.

En la provincia de Buenos Aires se produjeron el 43 % de los femicidios en la cuarentena, el 13% en Santa Fe, luego sigue Chaco con 7%, Tucumán, Jujuy y Mendoza».