Juan Carlos López y su hermano Mauricio dejaron atrás su pasado y se convirtieron en los pastores de una iglesia evangélica ubicada en Berutti al 7800. Ayer mientras los hermanos estaban compenetrados en su sermón, la justicia llegó a saldar cuentas por sus pecados en la provincia de Tucumán: Juan Carlos fue detenido por el homicidio de un policía en 2017 y Mauricio por asesinar a un hombre en 2022 durante un robo.
La detención de los hermanos López se produjo ayer a la tarde en la iglesia Unión Evangélica Pentecostal Filial 2. Fuentes de la investigación informaron que personal de la división Homicidios de la Dirección Departamental de Investigaciones de Mar del Plata, se infiltró entre los feligreses y una vez que finalizó el sermón rodearon a los hermanos sin dejarles posibilidad de escapatoria.
Los hermanos López eran buscados por la justicia tucumana desde 2017. Juan Carlos está acusado de haber asesinado a un agente de la Policía de Seguridad Aeroportuaria durante un partido de fútbol disputado el 5 de julio de 2017 durante un torneo barrial en la capital de la provincia.
En esas circunstancias hubo un enfrentamiento entre los hinchas y el oficial Maximiliano Santana, quien cumplía funciones de seguridad fue apuñalado en el pecho. Dos días después murió. La causa quedó en manos del fiscal Edmundo Jiménez quien ordenó la detención de Juan Carlos López, de 29 años.
Cinco años después, El mayor de los López se vio involucrado en el asesinato de una persona durante un robo ocurrido el 19 de abril del 2022. Los investigadores sospecharon que después de ese hecho, los hermanos huyeron de Tucumán con dirección a Mar del Plata.
Los detectives de la DDI, lograron dar con ellos luego de que la justicia de Tucumán les solicitara ayuda para poder esclarecer ambos crímenes. Los dos hermanos fueron alojados en la Unidad Penal 44 de Batán hasta que se resuelva su trasladado a la provincia d Tucumán.
Fuente: MI8
